FINAL DEL CUENTO: EL GORRIÓN Y EL PRISIONERO.-

El pájaro Pio-Pá, tras su descanso, volvió a ponerse en marcha hacia la casa azul y blanca. Tras mucho tiempo de vuelo, el gorrión llegó a la localidad de donde se encuentra esa casa azul y blanca. El gorrión encontró a la casa azul y blanca  que vivía la mujer del prisionero. El gorrión toca el timbre y la mujer abre la puerta y mira hacia todos lados y no ve quien ha llamado a la puerta, y el gorrión al ver que no lo veía pues el gorrión le silba y ya la mujer se da cuenta de que había un gorrión. 

El gorrión entró a la casa de la mujer y empezaron ha hablar y se hicieron amigos. La mujer le dice al gorrión que si quiere vivir con ella en su casa, el gorrión le dice que si. Un día, una tarde de frío, unos hombres estuvieron haciendo un plan para entrar a robar en la casa azul y blanca, a las 12:45 de la madrugada entraron a robar y  vieron que estaba el gorrión, ellos decidieron secuestraron al gorrión. 

Cuando despertó el gorrión vio de que no estaba donde tenía que estar. La mujer empezó a buscar al gorrión y no lo encontraba, la mujer se dio por vencida, fue a una tienda y compró otro gorrión. El gorrión como era astuto un día cuando los hombres se fueron de darle la comida se dejaron la puerta entornada y el gorrión lo vio y se escapó. Viajando hacia la casa azul y blanca un huracán lo mató, la mujer paseando vio al pajarillo muerto y se dio cuenta de que era el gorrión, lo cogió y lo guardó en una caja. Cuando murió enterraron a la mujer y al pajarillo en la misma tumba.